El juego de los disparates
A veces lo intento. Me invento excusas para creer que es todo mentira. O me excuso en inventos para no creer que todo es verdad. O hago trencitas con las verdades para creer solo una parte y acabo en un lío ingente, abro los ojos. Esto es mayúsculo.
A veces lo intento y fracaso, porque
Cuando esperar
es sinónimo de
asiento, y asentir
con la nariz
mientras los dedos
envuelven
un cigarrillo.
Y dejar que tomen
asiento
las emociones
y sus verdades,
acomodar los días
en las butacas
de los eclipses.
Cuando dormir es hundir
los pies en los relojes.
Cuando vuelve
la punzada
porque vuelven
el asiento
y la espera.
Saber y ser
verdad
al despertar
y darme de narices con tu espalda.
A veces lo intento,
pero,
sobre todo,
fracaso
en mis inventos
porque
aparece esa palabra
que en mi diccionario
no estaba.
Ilusión.
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